Las nuevas tendencias de la moda con tejidos tecnológicos.

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Las nuevas tendencias de la moda con tejidos tecnológicos.

Moda y tejidos tecnológicos.

Tal como comentábamos en el primer artículo de esta serie, la industria textil tiene como uno de sus objetivos lograr que percibamos a los tejidos como una segunda piel y que ella nos provea de mayor confort y nuevas utilidades.

Donde la innovación es disruptiva, desafiándose a sí misma, es en esa aspiración de convertir a los tejidos con propiedades excepcionales e innovadoras en parte de nuestro cuerpo. Esto que nos transporta al futuro, permite desarrollar textiles que suplen las debilidades de nuestro tejido epidérmico.

Por esto las telas adquieren una nueva dimensión que se acerca a una solución epidérmica inteligente. Aunque es una materia artificial,  se trata de lograr que se perciba como lo más natural posible e integrada a nuestro organismo.

Estos nuevos tejidos han promovido  y definido nuevas tendencias en la moda que podríamos agrupar de esta manera.

Arte.

Los nuevos tejidos son ahora un terreno fértil para la investigación creativa y aunque ya muchos diseñadores y artistas han utilizado la materia textil en sus creaciones, las nuevas  tecnologías les ofrecen novedosas y múltiples posibilidades para trabajar; redes metalizadas, tejidos hi-tech, sedas técnicas, neoprenos ultra ajustados, fibras naturales abonadas con hierro u otras aleaciones metálicas.

De estudios de diseño,  que en parte se han transformado en  laboratorios, nacen modelos innovadores como el vestido en polimetilmetacrilato trenzado de Fendi, el increíble organdí bordado de Christopher Kane, el traje de rafia e hilos de plata de Azzedine Alaia o los modelos de  Jesús del Pozo creados con tejidos de oro sobre seda y la gabardina engomada producida con neumáticos reciclados.

Diseñadores como Cardin o Paco Rabanne ya hicieron experiencias con tejidos metalizados y plásticos para acercar las fronteras entre arte y moda.  Otro ejemplo de esa nueva dimensión artística de los tejidos técnicos son las faldas termoplásticas de poliuretano con efectos de holograma de Julien David.

Eco.

Una increíble, real y necesaria revolución eco textil ya ha arrancado  y su avance es imparable. Muchos tejidos nacen ahora del reciclaje de botellas plásticas, redes de pesca, neumáticos usados, restos de café, algodón post industrial, entre otros materiales desechados después de su uso.

Estas telas lideran la batalla por el equilibrio, la preservación de la naturaleza y la producción y el consumo sostenibles. Una nueva era ha comenzado con la producción de los tejidos ecológicos.

Se han creado tejidos tecnológicos transformando materiales industriales y militares en desuso.  Otro ejemplo, un tejido sobre una base de lana virgen  a la que se le ha adosado una fina membrana técnica impermeable, a la vez protectora y transpirable.  Estos tejidos a base de algodón orgánico y fibras tecnológicas son una verdadera promesa de preservación.

Otra empresa, especialista en fibras y polímeros,  ha lanzado la primera fibra tipo Lycra desarrollada a partir de materiales biológicos. Así, esta opción comercial única de spandex bioderivado se compone en un 75% de productos renovable como la dextrosa, derivada del maíz.

Con las nuevas impresoras 3D se pueden crear nuevos materiales; como un cuero generado sin ningún defecto ni irregularidad, 100% reciclable y sin tener que sacrificar a ningún animal.

Tecno.

Nuevas fibras se crean a partir de la nanotecnología con propiedades magnéticas, eléctricas y catalíticas con las que se consiguen tejidos de algodón que pueden recargar nuestro móvil captando energía solar, telas que no se manchan, trajes que repelen los mosquitos de la malaria, entre otros.

Marcas de moda internacionales  están utilizando tejidos que confieren mayor comodidad, resistentes a los pliegues y a las arrugas y que pueden mantener una sensación térmica fría en pleno verano o cálida en pleno invierno o transformar la propia transpiración de la piel en fuente de calor y almacenarlo.

En el ámbito de la medicina y la cosmética las nuevas telas podrán cuidar activamente de nuestra salud y mejorar nuestro aspecto. Son los nuevos tejidos medicinales y cosméticos.

Por ejemplo, prendas interiores o leggings con micro-cápsulas cargadas de activos reafirmantes que refuerzan las fibras de elastina y colágeno de la piel o conteniendo medicina anti celulitis que activan la circulación sanguínea. Una conocida marca americana de jeans incluye en el tejido de sus pantalones activos cosméticos regeneradores en forma de micro-esferas que hidratan, tonifican o combaten “la piel de naranja”.

Ya podemos ver en el mercado una línea de lencería adelgazante e hidratante que utiliza un tejido constituido con fibras de cristales biocerámicos que mejoran el drenaje y la termorregulación del calor corporal para que penetren mejor las moléculas de los activos.

También se comercializan en la actualidad camisetas anti-UV, que incorporan un filtro de dióxido de titanio IP50 apto para pieles sensibles y que resiste más de 40 lavados a 40 grados.

Si las marcas de cosméticos ven en los nuevos tejidos “un envase dosificador”, los fabricantes textiles utilizan los compuestos cosméticos para convertir sus prendas en precursores y aliados de la belleza.

Esta es una nueva revolución que difumina los límites entre moda y cosmética. En poco tiempo podremos ver como los productos de belleza cuelgan de las perchas de nuestro armario.

Wearable.

Posiblemente, la innovación y el futuro no llegarán por agregar  dispositivos  electrónicos a las prendas, sino que éstas serán directamente electrónicas. Esto significa que al vestirnos nos conectaremos.

En realidad, lo que hoy llamamos wearables, que podríamos traducir al español como “tecnología vestible”, es una prenda a la que se le ha añadido un aparato electrónico que permite la conexión con otros dispositivos.

Registrar el movimiento o cantidad de pasos diarios, calcular las calorías consumidas, chequear el ritmo cardiaco, son sólo algunas de las nuevas utilidades que los nuevos tejidos ultra-electrónicos pueden ofrecernos.

Una marca deportiva alemana ha puesto a la venta una camiseta que incorpora un dispositivo conectado a Internet que recibe y analiza la información sobre el rendimiento y las variables durante un entrenamiento deportivo.

Está en etapa experimental una camiseta, cuyo tejido tiene integrados una serie de chips microscópicos, que al ponérnosla comienza a registrar nuestras constantes vitales, las que pueden monitorearse a distancia por un laboratorio, clínica o equipo médico.

Recuerden, de las perchas de nuestro armario no solo colgará la cosmética y la medicina, sino que también estará colgada parte de nuestros dispositivos electrónicos, digitales  y de comunicación.

Conclusión.

Estos nuevos tejidos tecnológicos se transformarán en nuestra segunda piel. Ella protegerá nuestra salud, cuidará de nuestra belleza, se adaptará al medio, responderá a nuestras necesidades, cambiará de acuerdo a nuestras  preferencias y nos mantendrá conectados.

Además de todo ello, nuestras prendas seguirán destacando nuestra singularidad y nos seguirán dando el toque de glamour, la excentricidad,  la bohemia o la exclusividad que buscamos cuando elegimos un artículo de moda.

¡Hasta el próximo artículo!

10 Comentarios

    • Estimado Alberto, gracias por tu comentario y por seguir el blog! Si, realmente es muy interesante y ya estamos viendo estos tejidos en las tiendas!Saludos.

        • Estimada Paloma, la mayoría de estas telas han sido desarrolladas para marcas que investigan y desarrollan innovaciones sobre este tipo de tejidos. No obstante, estoy seguro que hay mucha información on-line al respecto y un mercado creciente. Lamentablemente, no puedo darte los datos certeros que solicitas porque debería hacer la investigación correspondiente y a la que te animo que hagas tú. ¡Gracias por el contacto! Saludos.

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